Brand Of Sacrifice, es una banda canadiense de reciente formación (2018) según lo que pude investigar, la cual consta de dos guitarras, bajo, batería y voz. Por lo mucho o poco que sé del deathcore, no me entusiasmó mucho la recomendación, por lo que en un principio tuve mis reservas. Dichas reservas y algunos prejuicios, se vinieron abajo de manera instantánea una vez que comencé a reproducir Lifeblood.
De entrada, la versatilidad del vocalista es algo que me dejó gratamente sorprendido. La manera de combinar los múltiples recursos con los que cuenta, es algo que abre puerta para que el escucha, se clave por completo con los temas aquí expuestos. Las composiciones del álbum son de una técnica elevada que presumen agradablemente, encantando por completo a quien se atreve a soportar y disfrutar poco mas de 40 minutos de brutalidad desmedida y de buena ejecución. Guitarras y bajo que no quedan a deber nada, así como una batería colosal, brutal y despiadada que no da tregua en lo más mínimo, son detalles que complementan el enorme poder vocal del "frontman" de Brand Of Sacrifice.
Estereotipos arraigados en mi con respecto al deathcore, fueron derribados como mencioné anteriormente, con la inclusión de los famosos "breakdowns" característicos de este estilo, impregnados con una originalidad palpable, genial y que se agradece enormemente. Breakdowns pensados, carnosos, pesados, macizos y refrescantes que indudablemente lesionarán las cervicales del escucha. La inclusión de elementos electrónicos, voces femeninas y variados recursos ambientales, son la cereza de este tremendo "pastel" canadiense que ha llegado a mis oídos.
Álbum redondo, completo, cumplidor, violento, adictivo por momentos, memorable y sumamente reccomendable para quienes gustan del deathcore y buscan algo novedoso.
¡Vaya trabajo!
Necrolaico MMXXII
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